La tecnología para producir energía renovable está rizando el rizo. Ahora con energía renovable se puede producir más energía renovable. Eso es lo que han hecho científicos de la Universidad de Cambridge, que han desarrollado una técnica que utiliza energía solar para producir hidrógeno limpio a partir de la biomasa.
Y lo han explicando diciendo que hasta ahora la lignocelulosa -el principal componente de la biomasa vegetal- sólo había sido convertida en hidrógeno a través de un proceso de gasificación que utiliza altas temperaturas para “descomponerlo completamente”.
Sin embargo, con la nueva técnica que implicaba la adición de nanopartículas catalíticas al agua alcalina que contenía biomasa han conseguido el mismo objetivo.
La solución se coloca frente a una luz en un laboratorio que imita la luz solar (descrita como “ideal” para absorber la luz) y a partir de ahí la biomasa se convirtió en hidrógeno gaseoso.
“Hay mucha energía química almacenada en la biomasa cruda, pero no está refinada, por lo que no se puede esperar que funcione en maquinaria complicada, como un motor de automóvil”, dijo David Wakerley, del Departamento de Química de la Universidad de Cambridge, “nuestro sistema es capaz de convertir las estructuras largas y desordenadas que forman la biomasa en gas hidrógeno, que es mucho más útil”.
“Hemos diseñado específicamente una combinación de catalizador y solución que permite que esta transformación ocurra usando la luz solar como una fuente de energía. Gracias a esto, se puede agregar simplemente materia orgánica al sistema y luego, siempre que sea un día soleado, producir el combustible, el hidrógeno”.
Durante la investigación se utilizaron diferentes tipos de biomasa, incluyendo madera y hojas, pero no se necesitaron procesar antes de los experimentos.
“Nuestra tecnología impulsada por la luz solar es emocionante, ya que permite la producción de hidrógeno limpio de la biomasa sin procesar en condiciones ambientales”, dijo Erwin Reisner, jefe del Laboratorio Doppler Cristiano para SynGas Química Sostenible, donde se desarrolló la tecnología.
“Lo vemos como una alternativa nueva y viable a la gasificación a alta temperatura y otros medios renovables de producción de hidrógeno”, añadió Reisner, antes de decir que se estaban explorando una serie de opciones comerciales potenciales.