Madonna deberá cuidar sus palabras y actitudes por que esta siendo mirada desde muchos lados del sistema Ruso pudiendo quedar encarcelada o pagar una simple multa de 170 hasta 30.000 dolares.
El motivo de la encendida ira de los religiosos es su apoyo manifiesto a la comunidad gay, así como sus palabras elogiando a las Pussy Riot, una banda de chicas punk-rock que rodó un video en una Iglesia con una canción crítica contra el presidente Vladimir Putin.

En el juicio, la fiscalía pide tres años de prisión. Los abogados de Pussy Riot esperan que Madonna les exprese públicamente su solidaridad durante el concierto, sea con una camiseta o de viva voz.